Si
Viviera Mis últimos Días
Por Carlos de la Rosa Vidal
Si estuviera
viviendo mis últimos días
Viviría cada
día emocionado,
me
arrodillaría ante el mundo para hacer de cada acto
mi grito de
gratitud.
Si viviera
mis últimos días
los viviría
como si fueran los primeros.
Contemplando
fijamente, tal vez llorando por la emoción de estar vivo.
Inspiraría
al mundo allí dónde nunca hubo primavera.
Buscando el
sol que nunca antes amaneció,
abriendo los
aires como un libro lo es
por un niño
que muy pronto aprenderá a leer.
Reconocería
la inmensidad del universo
para saberme
humilde ante los siglos y las galaxias,
lloraría de
felicidad por descubrirme humano.
Dictaría
cada discurso como si fuera el primero o el último.
Me haría
conspirador de un mundo de amor.
Transmitiría
mi pasión en cada palabra, en cada obra.
Si viviera
mis últimos días caminaría para emocionarme con el caminar
abrazaría
para emocionarme con el abrazar,
saludaría
como saluda alguien que se despide o que recién llega.
Mantendría
este poder inspirador
y esta
emoción que siento al escribir en estos momentos.
Mantendría
esta lágrima que rueda mi rostro al escribir.
En cada acto
que pueda, y aunque me olvidara de
hacerlo
estoy seguro
que siempre recordaría volver a empezar.
Si viviera
mis últimos días
no me
importaría cometer errores si puedo crecer.
Contagiaría
mi entusiasmo por sentir que se existe.
No podría
contener mi urgencia por vivir,
mi
desesperación por ser paciente para contemplar el mundo.
No me
tomaría tannnnn en serio,
porque yo
tal vez no seré ni un recuerdo fugaz
a los
milenios que vendrán.
Si viviera mis
últimos días,
viviría de
verdad
no tendría
miedo a morir,
como jamás
lo tendría a vivir.
Sonreiría a
un hermano de la tierra-patria.
Ayudaría a crecer
a otros por la emoción
de construir
el mundo de otros que no conoceré.
Si viviera
mis últimos días
agradecería
todo lo que ha hecho posible que yo esté vivo
diría: “me
emociona estar aquí”
Gracias
Millonarias, nunca olviden ser conspiradores del cambio.
Me pondría a
llorar, agradeciendo todo lo visto
daría un
beso al cielo celeste y a los ases de este mundo
por hacerlo
más hermoso.
Viviría cada
día con una lágrima
por emoción
de estar vivo.
Carlos
de la Rosa Vidal
Callao-Perú
12
de Octubre de 2011